domingo, 2 de abril de 2017

Te banqué a muerte desde que te conocí. Cada día, mañana y tarde recibiéndote los clientes y lo que es peor "las clientas", esas cargosas que me andaban acariciando y llamando una y otra vez.

Aparecía cada vez que te llegaba un nuevo paciente y me quedaba ahí, haciendo el apoyo logístico que era tan necesario para vos. Y siempre, nos intercambiábamos las miradas sin que nadie se diera cuenta.

Me he bancado cada choco también...Sin embargo era la parte que me correspondía como buen asesor y secretario privado que era.
Siempre fui tan pancho porque si de algo estaba seguro es que vos y yo éramos un solo corazón. Perrito más amado que yo? Nunca hubo.

Ahora he llegado aqui, y estoy pensando en dos cosas. En como hacer que este mensaje te llegue y en como safar de los brazos de esta cargosa con alas. Necesito estar liberado para cumplir mi misión: recibir, recibir y recibir.

Ahora te toca a vos bancarme a mi. Te toca aceptar que he partido. Aceptar que nada se podía hacer porque sino, se hubiera hecho. Que mi partida, no era tu decisión. Que no dependió de vos ni un momento.

Ahora me voy a los portales de este bello lugar. Ahí me quedo pendiente. Porque de tanto recibir y recibir, un día sé que vas a ser vos el que toque el timbre.




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